- Masaje harmony. Maniobras muy sutiles acompasadas con el ritmo respiratiorio, consiguiendo un descanso prolongado en el tiempo. Lo recomendamos para personas que duermen mal y no consiguen desconectar a nivel mental.
- Masaje sushumna. Trata directamente los problemas de espalda, los cuales reflejansobrecargas físicas y emocionales. Favorece las funciones respiratorias.
- Masaje Iomi Iomi polynesian.
- Masaje vata dosha.
- Masaje pitta dosha.
- Masaje kapha dosha.
El masaje corporal ayurvédico se realiza con una aguda conciencia de las marmas y los chakras. En Ayurveda, las marmas son puntos vitales similares a los puntos de acupresión, que manipulados correctamente, revitalizan todo el cuerpo. Es en estas áreas donde el dolor y las debilidades tienden a congregarse. Los siete chakras son torbellinos de energía ubicados en las glándulas endocrinas principales: gónadas U ovarios, páncreas, glándulas suprarrenales, timo, tiroides, pituitaria y pineal:
- Muladhara o chackra raíz está conectado a las glándulas corticoadrenales, localizado entre ano y los genitales.
- Svadhisthana o chacka sacro conecta con las glándulas suprarrenales.
- Manipura o chacka del plexo solar localizado dos dedos por encima del ombligo.
- Anahata o chackra del corazón conectado a la glándula timo.
- Vishudda o chackra de la garganta conecta con la glándula tiroidea.
- Ajna o chacka del tercer ojo se relaciona con la glándula pituitaria y se localiza entre los dos ojos.
- Sahasrara o chackra de la corona está relacionada con la glándula hipófisis.
Durante un masaje ayurvédico, se produce una transferencia de energía electromagnética y los clientes son inducidos a un estado relajado, y a menudo, reporta una mejora en sus patrones de sueño y una sensación general de bienestar. En un mundo ideal, el masaje ayurvédico se llevaría a cabo diariamente para ayudar a mantener a raya los efectos del estrés y las tensiones cotidianas de cuerpo y mente. Las áreas de tensión subconscientes que albergan nuestra historia de carga y toxicidad emocional, que se exteriorizan a través de la musculatura y el malestar general sin causa en un origen propiamente físico, pueden ser tratados con esta técnica, ya que el masaje ayurvédico es capaz de leer el mapa corporal de un individuo de dolores y emociones y facilita el «desprendimiento» de las heridas no resueltas.
Los aceites utilizados para el masaje ayurvédico son 100% naturales, por lo que no se incluyen conservantes artificiales en su elaboración, por lo que el cuerpo no absorbe ninguna toxina durante su aplicación. Además, se utilizará de manera específica para cada cliente el aceite más adecuado para cada tipo de piel al igual que las maniobras de masaje serán realizadas según la necesidad del cliente.
Calidad, tradición y sensibilidad se dan la mano para conseguir un excelente resultado: eliminar la tensión muscular y poner en armonía cuerpo y mente.